DUELO Y MUERTE

cuando todo pierde sentido

Sabemos que las pérdidas hacen parte de la vida, pero cuando la muerte de un hijo o hija, pareja, padre o madre,  llega de manera violenta, repentina e inesperada, el impacto es tan fuerte que tu cuerpo lo vive como una amenaza.

Y recalco la palabra impacto, pues es algo para lo cual no estabas preparado y cuando escuchas decir que tu ser querido murió porque tuvo un accidente, se suicidó, tuvo un infarto, lo mataron, etc.; el dolor es tan profundo que en ese momento tu cuerpo, tu corazón y tu cerebro reciben una descarga eléctrica. El horror de su muerte es tan abrumador que tu cerebro empieza a producir cortisol y el sistema nervioso te va anestesiando.

Hay quienes dicen que están sin estar; y en este estado vas preparando el entierro, haciendo los trámites necesarios y atendiendo las cosas del día a día.

Mientras tanto tu sistema nervioso está teniendo una lucha interna por aceptar la permanencia de su ausencia; La muerte.

Y las mañanas siguientes al abrir tus ojos quieres pensar que ha sido solo una pesadilla, que volverá a casa, que abrirá la puerta, que te llamará, que podrás decirle todo lo importante que no le dijiste, pero no es así.

Su muerte te deja una sensación de vulnerabilidad e impotencia, sin duda hubieras hecho cualquier cosa para evitar que sucediera, pero lamentablemente es una realidad y te sientes abrumado.

Entonces empiezas  a recordar los eventos que rodearon su muerte e imaginas cómo las cosas podrían haberse desarrollado de manera diferente.

Puedes llegar a la conclusión de que tal vez, solo tal vez, hubieras podido haber hecho algo para evitar su muerte y empiezan la confusión, la rumiación de pensamientos, sientes que su muerte fue tu culpa por algo que hiciste o dejaste de hacer, tratas de darle explicación a lo sucedido.

«Y si hubiera…»,

si solo…»

«y si…

Todo esto es apenas normal, tu sistema está luchando con la noticia de su muerte, con la perdida y los problemas que esta conlleva. Se necesita tiempo para salir del estado de shock en el que te encuentras.

El tiempo va pasando y el dolor, aunque quieras, no se va. No hay manera de acelerar el proceso de duelo, has empezado un viaje que comenzó con esa impactante noticia “su muerte”.

En terapia mis pacientes pueden ver que no se trata solo de “vivir” el horror y la desolación de lo ocurrido sino de cómo transitar ese dolor y de tener los recursos y la fuerza para lidiar con todos los asuntos que están pendientes.

 

Algunas personas dicen que les toco continuar viviendo a pesar de ellos mismos, algo dentro de si les hacía seguir en automático.

Y es que, cuando tu ser querido muere no solo pierdes a esa persona, también pierdes tu relación con el o ella, el vínculo, los planes que tenían a futuro; pierdes lo que tú eras cuando estabas con ella. Muere una parte tuya que no volverá

¿Se te pierden las cosas?, ¿tu memoria te falla?, ¿te cuesta llevar consciencia del tiempo y llegas tarde a las citas o se te olvidan?, ¿te sientes desconectado de ti mismo y de los otros?, ¿notas que te cuesta trabajo tomar aun las decisiones más simples?.

¿Lo que antes te alegraba y daba placer ahora, no te importa?, ¿Todo carece de sentido?.

¿Dejaste de creer en Dios o te alejaste de El porque sientes que te fallo?,  ¿tienes oleadas de llanto que vienen de la nada y no puedes controlar?.

Todo esto ES NORMAL,

El impacto de su muerte ha afectado tu cerebro, cuerpo, emociones, relaciones, sistema inmune, y esto te altera a nivel cognitivo, emocional, espiritual y físico. Yo te puedo ayudar con esto.

¿Por qué aunque el tiempo pasa, no puedo sacarme esas imágenes de mi mente?

¿Por qué el dolor no se va?

Cómo avanzar?Porque  que has vivido un trauma y los recuerdos del evento, se almacenan como piezas fragmentadas en toda la mente, no han sido procesados, ni integrados y puedes sentir que están sucediendo en el presente.

Tener imágenes y pensamientos intrusivos, es debilitante y estresante y es por el impacto que el evento tuvo en tu sistema nervioso.

TE PREGUNTAS ¿COMO SEGUIR?

Todo es un proceso, no hay etapas, ni tiempos para mi hay estados. No hay una forma correcta de hacer el duelo ni un cronograma específico (en mi próximo articulo profundizaremos sobre este tema).

Vas a ir viendo como los síntomas y las emociones fluctúan. Es posible que te encuentres pasando del llanto a la rabia, de la desesperanza a la esperanza, del dolor a la resignación, de la culpa a la aceptación.

 

Duelo y Muerte

Superando el dolor

¿Dónde y cómo encontrar la  fuerza y los recursos para continuar?.

De tus familiares, de tus amigos, de grupos de apoyo y  de ir a TERAPIA 

CREEME es FUNDAMENTAL  ir a una terapia, pero no una donde solo hables y hables, esto no te ayuda y tampoco dejar que el tiempo pase.

Necesitas una terapia que te ayude, por decirlo de alguna manera, a “desarrollar músculos” para contener todo lo que has vivido y vivirás emocionalmente.

La terapia que ofrezco te ayuda a integrar y procesar sensaciones, recuerdos y pensamientos estresantes que están en tus sistema nervioso liberando las emociones asociadas con el recuerdo. Asi será más fácil transitar,  avanzar y sentirte más en control de tus pensamientos, emociones y acciones para poder transitar ese dolor y tendrás los recursos y la fuerza para lidiar con todos los asuntos que están pendientes.

Se que NO NECESITAS  escuchar: El o ella están en un mejor lugar, es el designio de Dios,  ya descanso, debes de ser fuerte, todo tiene una razón de ser, saldrás fortalecida de esto, etc.

En mis 30 años de experiencia como psicóloga especializada en trauma, he visto personas perder familias completas en un instante, encontrar a su pareja que se suicidó y tener que descolgarla, personas que han perdido a su madre en tiempo de COVID (la entregaron en una puerta de urgencias y luego les entregaron un ataúd cerrado) y muchas otras situaciones dolorosas.

Pero, lo que me inspira a hacer este trabajo es ver cómo, poco a poco, con resilencia, apoyo, terapia especializada en trauma mis pacientes van encontrando la manera de rehacer sus vidas.

Noche oscura del alma

Noche oscura del alma

A mis pacientes, cuando se sientan perdidos, los invito a que tengan la imagen de que están en un bosque en la mitad de la noche brumosa y oscura, no se ve nada, no tienen de que agarrarse y de pronto aparece una liana (de lo que se colgaba Tarzan) la agarras, te sostienes y te quedas ahí hasta que aparezca otra y así vas atravesando, la noche oscura del alma,  de liana a liana.

Si necesitas ayuda, será un gusto para mi acompañarte a recordar y honrar el paso de tu ser querido por tu vida. Recuerda y ten en cuenta que el que estés bien no implica que olvidaras a tu ser querido, este siempre será parte de ti,  lo importante es como transformar la culpa y enfocarte  en lo que te dio y compartieron.

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Fotografias tomadas de Pixabay gracias a  Lukas_Rychvalsky- RosZie-  jplenio- KBCH- Darkmoon_Art
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Martha Escamilla